El alzheimer está cada vez más presente en las familias españolas y supone un gran esfuerzo el cuidar a una persona con esta enfermedad neurodegenerativa. Y es por ese motivo que los cuidadores tienen un elevado riesgo de desarrollar depresión y otras enfermedades. Para un cuidado adecuado es necesario el apoyo del entorno familiar de la comunidad.
Es conveniente tener conocimientos específicos para manejar con éxito las actividades de la vida cotidiana y las conductas difíciles de los enfermos.
El alzheimer y su diagnostico:
En las enfermedades que corresponden a la demencia, el alzheimer es la más común. Se prevé que el número de pacientes diagnosticados de alzheimer aumente de forma significativa en los próximos años y también así las personas padecerán los efectos en edades más tempranas a las actuales.
Enfrentarse al diagnóstico puede ser abrumador. Por ello es recomendable informarse en profundidad y hacerle a los médicos todas las preguntas que tengamos.
Buscar asociaciones como las AFA (Asociación de familiares de Alzheimer) puede ser muy positivo para no encontrarse solo ante esta nueva situación y obtener respuestas a nuestras dudas.
Siempre es recomendable estar lo más informados posible. La enfermedad avanza generalmente a un ritmo lento y conocer al máximo posible sus fases nos ayudará a poder atender mejor a la persona que lo padece.
Es sencillo sentirse desorientados cuando nos enfrentamos a dicha enfermedad como cuidador, ya sea familiar o profesional.
Alzheimer en la actualidad
Recientes estudios aseguran que diagnosticado a tiempo se puede retrasar los efectos más graves de la enfermedad. Uno de los estudios realizado en San Luis (Misuri, EEUU) por un grupo de científicos especializados ha hallado una manera de eliminar placas de la enfermedad causantes del alzheimer mediante anticuerpos. Estos anticuerpos consiguen eliminar las placas años antes de que aparezcan los síntomas de la enfermedad.
Por el momento, estos resultados se han dado en estudios mediante ratos y no ha sido probado todavía en personas. Sin duda, avances de este tipo beneficiarán a paliar las perspectivas de futuro sobre la enfermedad que son poco positivas.
La comunicación con el enfermo de alzheimer:
- Para superar las dificultades que presenta un paciente para comunicarse será conveniente emplear palabras sencillas, y un tono amable y comprensivo.
- Reducir distracciones nos ayudará a centrar su atención.
- Hablarles y tratarles como adultos, sin ningunearlos como si no estuvieran presentes.
- Cuando estén luchando por encontrar la palabra adecuada podemos decírsela con amabilidad.
- Aunque no sea fácil comprenderles es importante tener paciencia y ayudarles a que se expresen.
- A menudo, un instrumento musical o actividad no verbal puede ayudarles a canalizar su expresividad.
En la intimidad del baño:
- Bañarse puede suponer una situación estresante y puede dar miedo a una persona desorientada.
- Será positivo establecer una rutina, haciéndolo coincidir con la hora del día dónde se encuentre mas tranquilo el enfermo.
- Preparar todo con antelación es importante para no dejar sola a la persona e ningún momento durante el baño.
- Comprobar la temperatura del agua.
- Utilizar elementos que mejoren la seguridad en la bañera. Barras, alfombras antideslizantes.
Consejos para ayudarle a vestirse:
- Es conveniente convertirlo en una rutina, a la misma hora cada día.
- Intentar que sea autónomo para vestirse en la medida de sus posibilidades.
- Dejarle escoger su ropa favorita. Si la tiene valorar la posibilidad de comprar varios conjuntos iguales.
- Organizar el orden de la ropa para hacer mas fácil su accesibilidad.
- Usar siempre ropa cómoda, segura y fácil de poner.
Comer con el alzheimer, un reto de paciencia:
- Hay enfermos de alzheimer que conservan su apetito, en cambio a otros les cuesta mucho comer y hay que incentivarlos.
- La hora de comer puede ser un buen momento para sociabilizarse. Limitar el ruido y las distracciones.
- Escoger platos y cubiertos que favorezcan la autonomía.
- Utilizar pajitas que le ayuden a beber e hidratarse.
- Revisar la salud dental.
Entrenamiento durante el día:
- Nos ayudará potenciar las habilidades que tengan adquiridas, mas que desarrollar habilidades nuevas.
- Si observamos que el paciente se frustra en la realización de la actividad lo distraeremos y guiaremos hacia otra actividad.
- Involucrarlos en el proceso de preparación de la comida, poner la mesa o recoger puede ayudarles a mantenerse activos y entretenidos.
Ejercicio físico:
- Incorporar en las rutinas diarias el ejercicio físico puede ser saludable para la persona que tiene Alzheimer y también para el cuidador.
- Elija una actividad física que paciente y cuidador disfruten por igual y conviértanla en una rutina.
- No debe convertirse en un esfuerzo, mas bien en algo lúdico.
- Favorecer la autonomía aunque no realice los ejercicios correctamente.
- Prestar atención a las señales de agotamiento o esfuerzo excesivo y consultar al médico.
- Aprovechar para estar en contacto con el exterior cuando el clima lo permita.
Manejo de la incontinencia:
- Programar las visitas al baño de una forma extraordinariamente rutinaria.
- Actuar rápidamente si vemos señales de que la persona tiene que ir al baño.
- Si ocurren accidentes no deseados actuar con calma, paciencia y cariño.
- Evitar la ingesta de líquidos antes de ir a dormir.
- Si van a salir a la calle tener localizados los baños y lleve ropa sencilla y fácil de quitar.
Manejo del insomnio en el alzheimer:
- A menudo la llegada de la noche inquieta a las personas con alzheimer, algo que se conoce como «síndrome vespertino»
- Es importante mantener activa a la persona durante el día y limitar las siestas. Si bien ha de tener una vida tranquila y descansada.
- Al llegar la noche mantener un tono tranquilo para inducir el sueño, bajar la luz y poner música relajante si le gusta.
- No dar bebidas con cafeína.
- Usar lamparas de pared o de mesa si la oscuridad les da miedo.
Manejo de las alucinaciones:
- Informar al médico en caso de que aparezcan delirios y alucinaciones.
- Confortar a la persona si está asustada. No discutir.
- Intentar distraerla con otras actividades.
- Evitar ver escenas violentas o perturbadoras en la televisión. proporcionar siempre un entorno tranquilo.
- Mantener a la persona lejos de objetos peligrosos durante esos episodios.
El cuidador de la familia o la cuidadora profesional tienen que mejorar sus capacidades y formación para atender esta enfermedad. Entender e interiorizar esta guía básica de Alzheimer te ayudará como cuidadora de ancianos a mejorar no solo la calidad asistencial, sino tu calidad de vida durante el desarrollo de tu profesión en el caso de cuidadoras profesionales, o tu función en el caso de cuidadores que asumen el rol dentro de la propia familia.
Esperemos que os ayuden, y os sugerimos que si queréis que tratemos algún tema concreto, nos lo hagáis saber.
7 comentarios
Buenos consejos.
Pienso que la persona con esta enfermedad tiene que llevar una rutina de todo lo que se menciona, diaria.
Es importante no alterar las costumbres, como la hora de comer, del baño, medicación, etcétera, simplemente porque la persona se adapta a un horario fijado por su cuidador y así es más fácil que recuerde que le toca hacer en cada momento, aunque aveces se lo tengamos que recordar, en mayor o menor medida.
Pese a todo, aconsejo a todo el mundo que cuide a una persona con esta cruel enfermedad, que este constantemente.recopilando información, bien a,través de las redes sociales, libros, etcétera.
Todas las personas con Alzheimer, no son iguales y las variaciones a los cuidadores nos puede desorientar, así que hay que tomar las cosas como vengan y tratar siempre de resolver lo mejor posible las incidencias que puedan ir surgiendo el día a día.
No es tan difícil y si nos lo proponemos, si que se puede llevar todas las cuestiones conforme vayan saliendo.
Un saludo a todos y todas
Hola a todo el mundo!!
Animo a todos a que escriban sus experiencias, impresiones…..
No me gusta hablar sola!!
Saludos a todos y todas!!!
• EL CUIDADO DE LA PERSONA CON ALZHEIMER EN SU DOMICILIO
Los pacientes con algún tipo de demencia presentan cambios continuos de conducta e incluso comportamientos difíciles de manejar que pueden complicar la atención en el domicilio. No obstante, existen ciertas pautas que permiten facilitar las tareas de ayuda que la pérdida de facultades requiere, como vestirse, asearse, comer. Las personas con Alzheimer son muy sensibles a los cambios de entorno y de las rutinas, por lo que es muy recomendable que cualquier cambio se efectúe de forma gradual.
También hay que evitar las situaciones de peligro y retirar del alcance del paciente cualquier objeto punzante o nocivo con el que pueda hacerse daño a sí mismo o a las personas que le rodean.
• PARA MEJORAR LA DEAMBULACIÓN Y LA DESORIENTACIÓN NOCTURNA
Se puede dejar alguna luz encendida, utilizar carteles señalizándolos diferentes espacios de la casa, hablar con el médico de atención primaria para reajustar la medicación y controlar el sueño (asegurarse de que el paciente no duerme por el día, sino que hay que cambiar la rutina de sueño para que duerma por la noche).
• CUANDO SE CAE EL PACIENTE Y ESTÁ UNA PERSONA SOLA PARA CUIDARLO
En primer lugar hay que mantener la calma. Es recomendable pedir ayuda y levantarlo entre dos o más personas. Además, si existen sospechas de que se ha podido producir una fractura o lesión, no se debe mover al paciente y llamar al 112, taparlo y esperar que llegue la asistencia sanitaria.
• AYUDAS TÉCNICAS PARA ASEAR A UN PACIENTE
Debemos tener en cuenta que entre una bañera, una ducha y un sumidero, lo más práctico y eficaz es esto último, el sumidero(o plato de ducha de obra, a ras de suelo), por ser de más fácil y cómodo acceso, sin tener que salvar ningún escalón. Si en un domicilio no se dispone de plato de ducha, sino de bañera, y no es posible realizar el cambio, hemos de tener precaución e intentar adaptarla para evitar accidentes. Se pueden colocar oblicuamente en la pared interna de la misma, barras antideslizantes, a las que el paciente se pueda sujetar sin peligro. En el interior de la bañera se deben poner alfombrillas antideslizantes, para evitar resbalones. Cuando el paciente no se pueda mantener erguido dentro de la bañera y necesite sentarse, se puede hacer uso de un asiento giratorio de bañera, con respaldo y apoyabrazos, muy cómodo de usar y sin necesidad de realizar esfuerzos a la hora de introducirse en la bañera.
• PRINCIPALES RIESGOS QUE TIENE EL DOMICILIO PARA UN PACIENTE DE ALZHEIMER
Es importante retirar de su alcance todos los objetos cortantes, punzantes y eléctricos, con los que pueda hacerse daño, también cualquier producto nocivo para la salud como productos de limpieza, medicamentos, pinturas, etc.
Además, se debe tener precaución con los radiadores de casa, con los que pueden quemarse; proteger los enchufes eléctricos; guardar los documentos importantes en un lugar seguro; iluminar bien las escaleras y, si es posible, instalar pasamanos a ambos lados; colocar un antideslizante al inicio del peldaño, para evitar resbalones y fijar bien el pie; eliminar los pestillos de las puertas interiores, para evitar que puedan quedarse encerrados.
Se deben evitar los suelos mojados y resbaladizos, ya que son causantes de numerosas caídas.
También se tienen que utilizar los toalleros a modo de barras de sujeción, ya que no están preparados para ello y no soportan mucho peso. En la medida de lo posible, hay que evitar la cocina de gas.
También se deben eliminar las alfombras que puedan causar caídas.
• Y PARA TERMINAR
En ocasiones, ante la posibilidad de que la figura del cuidador en el domicilio sea un recurso, puede producirse un rechazo lógico de la persona con demencia a que alguien ajeno, desconocido, entre en su hogar invadiendo su espacio e intimidad
Es muy importante que la persona sea un/a buen/a profesional, conocedora de la enfermedad y con experiencia en el trato y cuidado de personas con demencias. Se debe crear la necesidad en el paciente y satisfacer dicha necesidad.
También es positivo establecer un vínculo afectivo entre el paciente y cuidador.
Espero a ver sido de ayuda
Gracias y un saludo de Concha Company
Un familiar cercano ha sido diagnosticado que padece de una etapa temprana de Alzheimer. Es una persona de 67 anos. Su condición de salud es aceptable. Me interesa orientación en torno a la forma y manera de atender sus necesidades de cuido.
Hola Jose Gustavo, gracias por confiar en nosotros. La enfermedad de Alzheimer es progresiva y el deterioro cognitivo va produciéndose a lo largo del tiempo. Al encontrarse tu familiar en una fase temprana, es importante que os pongáis en manos de un neurólogo, dado que, si bien no existe una cura definitiva para la enfermedad, los fármacos disponibles logran retrasar su evolución.
En lo que a los cuidados se refiere, me parece importante decirte que esta enfermedad puede ser muy frustrante para los familiares, porque nos cuesta mucho aceptar cómo nuestro familiar va «desapareciendo» y sentir que ya no reconocemos a la persona que fue, porque ese ese efecto que tiene la pérdida de la memoria, que nos hace perder nuestra identidad y nuestra dignidad. Por ello, recuerda siempre, que tu familiar se encontrará perdido y desorientado a medida que los síntomas se agraven, y la mejor medicina que podréis darle es vuestra paciencia y vuestro cariño incondicional, proporcionándole un entorno seguro, familiar y afectivo.
te adjunto una pequeña infografía que puede ser de ayuda en este momento. https://www.facebook.com/cuidum/photos/pb.1423944477902965.-2207520000.1464856706./1578839082413503/?type=3&theater
Un saludo.
Muy útil la información. Muchas gracias por tus consejos.
Gracias Josefina por tu comentario. En Cuidum estamos siempre para poder guiarlos y aconsejarlos.
Un saludo cordial,