Halloween puede ser una noche abrumadora para una persona mayor que viva sola.
Cada vez es más común ver como en nuestras casas y calles aparecen las calabazas, las telas de araña, los disfraces y el truco y trato «tradicionales» del 31 de octubre. Halloween puede asustar a nuestros mayores y debemos tomar ciertas precauciones al respecto.
Una de las fiestas mas esperadas del mundo anglosajón, la noche de Halloween, víspera del tradicional Día de Todos los Santos, se ha convertido en una fecha importante de nuestro calendario, aunque no sea fiesta de manera oficial.
La celebración que llegó a Estados Unidos a través de los irlandeses que emigraron desde su país de origen hasta el norte del continente americano se está trasladando a España con fuerza, donde significa literalmente «víspera de Todos los Santos»
Una noche de golosinas y disfraces divertidos, pero para una persona mayor puede ser abrumadora. Con la puerta golpeando constantemente por caras desconocidas que pueden intimidar, especialmente a alguien que viva solo.
Una empresa Inglesa de atención a domicilio para personas mayores ubicada en Layton, está ofreciendo “cuidadores de Halloween» para que las personas mayores o sus familiares pueden contar con ellos esa noche, de manera que lo que podría ser temeroso pueda vivirse de forma divertida.
El cuidador puede comprar caramelos, abrir la puerta y ayudar con el “truco o trato” o simplemente proporcionar compañía.
La empresa ofrece las siguientes recomendaciones para los mayores en la noche de Halloween:
- Asegúrese de que todas las plantas; las vías de entrada y porches están libres de decoraciones.
- Eliminar cualquier tipo de decoración de Halloween que implique llamas, como una calabaza iluminada.
- Colocar las calabazas talladas en el exterior para mantener alejados el olor y los insectos.
- Añadir luces nocturnas en los vestíbulos, pasillos y habitaciones.
Las personas mayores, que albergan sentimientos de vulnerabilidad, o quienes sufren demencias por lo que su percepción de la realidad es confusa pueden verse afectadas por este tipo de eventos intimidantes donde las luces, los ruidos, las decoraciones extrañas y las caretas o los disfraces pueden provocarles confusión y temor.
Debemos preservar un entorno que garantice la tranquilidad y la seguridad de nuestros mayores, ahora que esta festividad comienza a celebrarse de forma mayoritaria en nuestras ciudades.