¿Qué alternativas asistenciales hay frente al cierre de centros de día?
Durante el tránsito hacia la nueva normalidad muchos centros de día optaron por el cierre provisional de sus instalaciones como medida de prevención del Covid-19. Ya en la nueva normalidad, no todos estos centros para gente mayor y personas con discapacidad han podido retomar la actividad normal, dejando a muchas familias en una situación complicada. En estas circunstancias, la asistencia a domicilio se vuelve a mostrar como solución flexible en el cuidado de personas mayores y/o dependientes en sus hogares.
Cierres temporales de centros de día ¿qué hacemos con nuestros mayores?
Los centros de día son lugares en los que las personas mayores tienen la oportunidad de socializar, compartiendo tiempo y espacio con otras personas mayores en circunstancias similares.
¿Son un foco de contagio los centros de día? A tenor de las medidas que se han adoptado en muchos municipios y comunidades autónomas, todo apunta a que el problema sigue estando latente. Bien sea por prevención o por la existencia de un riesgo real, muchos de estos centros han preferido permanecer cerrados a pesar de haber desaparecido dicha prohibición.
Las consecuencias del cierre de centros de día para los adultos mayores y sus familias han sido más que notables:
- Problemas para conciliar la vida familiar y la vida laboral.
- Pérdida de rutinas que resultan esenciales para las personas mayores.
- Limitación de las actividades orientadas a la población de edad avanzada.
- Deterioro psicológico, físico y emocional de los ancianos y las personas dependientes.
- Falta de atención terapéutica fundamental para mejorar o mantener la autonomía personal del mayor.
- Conflictos en el hogar al no saber cómo gestionar esta situación.
Preocupación de las familias por el incremento de casos
Otro de los problemas derivados de la nueva situación sanitara es la aparición de rebrotes de Covid-19 en todas las comunidades autónomas. Más de dos meses después de la finalización del estado de alarma, son muchos los centros de día que todavía no han ingresado en la nueva normalidad por temor a convertirse en un foco de contagios.
A esta preocupación se le suman otros motivos de carácter económico. La situación en muchos casos se ha visto agravada por la importante inversión económica que supone readaptar las instalaciones a las nuevas exigencias. La contratación de más personal, la redistribución de los espacios y la implantación de medidas de higiene y distanciamiento más estrictas son aspectos que no todos los centros de día son capaces de afrontar.
Por otro lado, no podemos obviar las noticias poco alentadoras acerca de un progresivo incremento en el número de contagios. Esta realidad ha provocado el retraso en la reapertura de muchas de estas instalaciones, condenando a un alto porcentaje de personas mayores a una notable pérdida de calidad de vida. Con las familias cuidando desde inicios de la pandemia a los adultos mayores y/o dependientes, el deterioro de las relaciones sociales y familiares se ha hecho más que evidente.
Búsqueda de alternativas de cuidado: Asistencia domiciliaria a medida
El panorama que se presenta actualmente para muchas familias en relación al cuidado de personas mayores y dependientes no es mucho más favorable que el vivido durante el confinamiento. Los cierres o limitaciones de los centros de día y residencias, exigen valorar otras alternativas para la asistencia al mayor.
La solución que antes planteaban los centros de día ahora debe ser abordada desde otra perspectiva y la asistencia domiciliaria se ha posicionado como la alternativa más adecuada. Gracias a estos servicios de cuidados de mayores en el hogar, a su flexibilidad y a su alto nivel de personalización, los mayores y personas dependientes tienen la posibilidad de recuperar su calidad de vida.
Cuidados entre semana, asistencia nocturna, servicio en días alternos, fin de semana… En Cuidum ofrecemos servicios de asistencia que se adaptan en horarios y exigencias a las necesidades específicas de cada entorno familiar. De este modo, la presencia de una cuidadora de ancianos consigue aliviar la presión que supone conciliar el cuidado de estas personas con el desarrollo de la vida laboral y de otras rutinas familiares.
Asistencia integral para personas mayores dependientes en el propio hogar
Los cuidadores a domicilio tienen un perfil muy bien definido que va un paso más allá de la asistencia convencional a personas dependientes. Su presencia representa confianza, seguridad y acompañamiento, aspectos fundamentales para el bienestar de las personas mayores.
La alternativa asistencial que planteamos desde Cuidum es la de un cuidador profesional, con experiencia y capacitado para proporcionarles a los mayores un servicio totalmente personalizado que atienda a sus necesidades específicas. En este sentido hablamos de una asistencia integral que ayuda a mejorar la calidad de vida del mayor.
En un escenario como el actual, no hay nada más seguro que estar en casa, y los cuidados a domicilio no sólo proporcionan esa confianza sino que aseguran el bienestar de las personas más vulnerables y de sus familiares.
- Horarios de asistencia flexibles.
- Acompañamiento en todo momento.
- Apoyo en las tareas cotidianas.
- Fomento de la socialización con salidas seguras al exterior.
- Mantenimiento de la actividad física.
- Actividades para la mejora y la estimulación cognitiva.
- Estabilidad psicológica y emocional.
- Mayor confianza, seguridad y autoestima.
El cierre temporal o permanente de los centros de día y otros centros residenciales ha supuesto la privación de unos servicios esenciales en la vida de muchas personas mayores y dependientes. Afortunadamente, la flexibilidad y versatilidad de los servicios asistenciales a domicilio de agencias de cuidadores como Cuidum han logado suplir esas carencias de la nueva normalidad. Una alternativa segura y eficiente para salvaguardar el bienestar de nuestros mayores y garantizar la tranquilidad de sus familias.
2 comentarios
El ayudar al projimo te ayudas tu mismo
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