El último brote de intoxicación alimentaria en España se ha detectado el pasado día 15 de agosto y su alcance ha obligado a activar la alerta sanitaria en gran parte del territorio nacional por motivo de la listeriosis. En este caso, la bacteria Listeria Monocytogenes es la causante de una grave infección que ya afecta a un considerable número de personas.
Aunque el núcleo de población con mayor riesgo de contraer esta enfermedad son mujeres embarazadas, recién nacidos, personas con más de 65 años y aquellos con un sistema inmunitario débil a causa de enfermedades como el VIH o el cáncer, es poco frecuente que otros grupos poblacionales se vean afectados de forma grave por una infección por listeria ya que, comúnmente, esta enfermedad suele manifestarse como una leve gastroenteritis.
¿Qué es la listeriosis?
La listeriosis es una infección provocada por la bacteria Listeria Monocytogenes. Esta bacteria se encuentra en la tierra, en el agua contaminada y en las heces de los animales. También puede aparecer en una gran variedad de alimentos crudos como frutas, verduras, alimentos procesados y leche no pasteurizada.
¿Cómo se contrae la listeria?
La enfermedad se contrae, por lo general, tras la ingesta de alimentos contaminados como:
- Frutas y vegetales que provienen de suelo contaminado o en los que se ha usado como fertilizante estiércol contaminado.
- Carne de animal contaminado.
- Leche no pasteurizada o alimentos en los que se ha utilizado leche no pasteurizada en su elaboración.
- Alimentos que han sido contaminados durante y después de su procesamiento: embutidos, fiambres, perritos calientes y quesos blandos para untar.
Al ingerir un alimento contaminado, este entra en el aparato digestivo y, si existe un gran número de bacterias, pasa a la sangre. Si esto ocurre, la bacteria puede circular a través del torrente sanguíneo y afectar a diferentes órganos del cuerpo y dar lugar a una listeriosis invasiva que puede resultar potencialmente peligrosa.
Síntomas de la listeriosis
La mayoría de las personas infectadas con listeriosis presentan síntomas entre la primera y la cuarta semana después de haber ingerido el alimento contaminado.
Los síntomas más frecuentes son:
- Fiebre
- Vómitos
- Diarreas
- Dolores musculares
- Rigidez del cuello
- Debilidad
Síntomas de la listeriosis en la población de riesgo
Las complicaciones de una infección por listeria en la población de riesgo pueden llegar a ser muy graves, incluso provocando su muerte.
Síntomas en mujeres embarazadas
Las infecciones que se producen en el primer trimestre del embarazo puede provocar:
- Aborto espontáneo
- Infección del feto
El contraer listeria al final del embarazo puede llegar a provocar:
- Mortinato (nacimiento del bebé muerto)
- Muerte del bebé tras pocas horas de su nacimiento
Síntomas en bebés
Los bebés afectados de listeria pueden presentar los siguientes síntomas:
- Pérdida de apetito
- Vómitos
- Ictericia
- Dificultad respiratoria
- Erupción cutánea
Síntomas en adultos mayores de 65 años
Los síntomas en este grupo de riesgo se pueden presentar de diferentes maneras:
- Endocarditis (infección del corazón)
- Meningitis (infección del cerebro o del líquido cefalorraquídeo)
- Neumonía (infección pulmonar)
- Septicemia (infección en la sangre)
- Gastroenteritis
- Lesiones cutáneas
- Abscesos
- Conjuntivitis
Diagnóstico y tratamiento de la listeriosis
La listeria se diagnostica tras un examen en un laboratorio. Para detectar la infección es necesario realizar un cultivo bacteriano en una muestra de tejido corporal o de líquidos del cuerpo como la sangre; la placenta; las heces; la orina o líquido cefalorraquídeo. Si tras el cultivo crece la bacteria de la Listeria Monocytogenes, se administra, por vía intravenosa, un tratamiento con antibióticos, siempre y cuando prescrito por el médico.
Cuando la enfermedad afecta a niños, adolescentes y a adultos sanos, no suele ser necesario ningún tipo de tratamiento. En este sector de la población los síntomas suelen ser leves y remiten a las pocas semanas de haber ingerido los alimentos contaminados.
¿Cuándo se debe consultar al médico?
Si se tiene la sospecha de que se ha consumido un alimento que ha sido retirado del mercado por un brote de listeria, se debe prestar especial atención a los síntomas que la listeriosis presenta (fiebre, dolores musculares, náuseas o diarreas) y acudir tan pronto como sea posible al médico.
En el caso de presentar fiebre alta, fuerte dolor de cabeza, rigidez en el cuello, sensibilidad a la luz o confusión, se debe procurar atención médica con carácter urgente. Estos síntomas pueden ser los indicios de una complicación de la infección por listeria y puede derivar en meningitis bacteriana.
¿Cómo prevenir la infección por listeria?
Es importante seguir unas sencillas pautas en la manipulación de los alimentos para evitar contraer una infección por la bacteria de la listeria:
- Lavar y desinfectar las frutas y las verduras
- Refrigerar adecuadamente los alimentos
- No consumir lácteos y preparados no pasteurizados
- Cocinar muy bien los alimentos, sobre todo los platos de carne, aves y huevos
Además de estas recomendaciones, es importante una correcta higiene en los utensilios de cocina y lavarse las manos con agua tibia y jabón antes y después de manipular los alimentos.
Precauciones específicas para personas mayores y embarazadas
Las personas con un sistema inmunológico débil, mayores de 65 años y mujeres embarazadas se enfrentan a mayor riesgo de ser infectados por listeria, por lo tanto, deben tomar precauciones extras con respecto al tipo de alimentación:
- A no ser que en el envase se especifique que está fabricado con leche pasteurizada, no se debe consumir quesos blancos tipo Feta, Brie, Camembert, queso blanco o fresco
- Evitar los perritos calientes, carnes enlatadas y fiambres a no ser que se hayan calentado hasta conseguir una temperatura muy alta.
- Mantener el líquido que contiene los envases de los perritos calientes alejados de otros productos alimentarios, de los utensilios de cocina y de las superficies de trabajo.
- Lavarse las manos tras haber manipulado perritos, carnes en lata y fiambres.
- No consumir carnes que no cumplan con las condiciones higiénicas adecuadas.
¿Por qué se activa la alerta sanitaria?
La alerta sanitaria se activa en situaciones de riesgo para la salud pública (salud ambiental, seguridad alimentaria, uso de medicamentos o de productos sanitarios) que puedan derivar en brotes epidémicos.
Actualmente, los brotes de listeriosis no son comunes. Aún así, la listeria es una enfermedad que provoca hospitalizaciones durante todo el año. Los estrictos controles sanitarios dirigidos a la industria alimentaria han conseguido reducir considerablemente los casos de infecciones, aunque no han logrado eliminarlos por completo.